martes, 20 de abril de 2010

CLARIN: NI EL VIDEO ALCANZO PARA QUE EL FISCAL LO DETENGA


http://www.clarin.com/diario/2010/04/20/um/m-02184582.htm
POLEMICO CASO EN TIGRE
Ni el video alcanzó para que el fiscal lo detenga.

Inseguridad
Las cámaras mostraron in fraganti a dos ladrones de autos. Y uno de ellos fue detenido. La comuna hizo la denuncia, pero el fiscal lo liberó. P.42.

Clarín. Policiales. P.42.
Polémica por el ataque a un automovilista en Tigre

El ladrón quedó filmado, pero el fiscal no lo acusó
Dos asaltantes golpearon a un hombre y trataron de robarle el auto. El hecho fue registrado por las cámaras del Municipio y uno fue detenido. El fiscal archivó el caso diciendo que las pruebas no alcanzan.

Liliana Caruso
lcaruso@clarin.com

Era pleno mediodía cuando dos jóvenes se acercaron a un Chrysler Neon que estaba parado a un costado de la Ruta 197 en Pacheco, partido de Tigre.

El dueño del auto estaba al volante, esperando que su hermano hiciera unas compras en un supermercado, cuando los jóvenes, uno por cada puerta, lo amenazaron y comenzaron a golpearlo. Querían llevarse el auto, pero en medio de los forcejeos la víctima logró bajar por la puerta del acompañante y escapó corriendo, llevándose las llaves.

Los ladrones, al ver que no podían llevarse el auto, también huyeron. Toda la secuencia fue captada por las cámaras de seguridad del municipio de Tigre. Enseguida, desde el Centro de Operaciones los funcionarios alertaron al 911 y la Policía logró detener a uno de los frustrados ladrones a unos 500 metros de allí. Se trataba de un joven de 22 años, indocumentado y desocupado, que vive en Pacheco (es el que en las fotos golpea al conductor y lleva una mochila).

Pese a que fue detenido in fraganti, el joven sólo estuvo aprehendido un rato, ya que como la víctima no había hecho la denuncia, el fiscal Marcelo Lloret decidió liberarlo. Ante esta decisión, la Policía y el Municipio buscaron por su cuenta a la víctima, quien fue localizada y aportó su relato.

"Cuando hablamos con el fiscal, nos dijo que si no identificábamos a la víctima y le tomábamos la denuncia no había delito para investigar, y que si bien estaba filmado, las cámaras eran un complemento de la instrucción. Ni siquiera había visto el video", contó una fuente policial a Clarín.

Para que el caso no quedara impune el Municipio impulsó, junto con la Policía, la búsqueda de la víctima del intento de robo por la chapa patente que había quedado grabada en las imágenes. Así dieron con Alberto, un ciudadano alemán de 62 años, que vive en Tigre.

La víctima del robo contó ante las autoridades de la comisaria 1° que el domingo 21 de febrero al mediodía estaba dentro de su auto esperando a su hermano, que había bajado para hacer algunas compras.

"Por la derecha se me acercó un hombre que me preguntó la hora a modo de distracción. Ahí otro sujeto se acercó por detrás y recibí un golpe de puño en la oreja a través de la ventanilla. Me dijo `bajá del auto y dejá las llaves’". La víctima contó que no sabe bien cómo hizo, pero llegó a tomar las llaves del auto y se bajó por el lado del acompañante.

"Salí corriendo y vi que uno de los ladrones entró al auto, pero al ver que las llaves no estaban se escaparon". Cuando Alberto vio que los sospechosos se habían ido regresó al auto. "No me faltaba nada", aclaró el hombre en la comisaria, y confirmó que no quería instar a la acción penal, aparentemente por temor.

Con esos elementos, el Municipio y la Policía insistieron: llevaron a la fiscalía el video e incorporaron la declaración de la víctima, que confirmaba el intento de robo.

Pero, según dijeron, el fiscal volvió a desestimar la investigación.

¿Por qué? Según el funcionario, a pesar de las imágenes y la declaración de la víctima, en principio "no se puede decir a ciencia cierta qué delito se cometió y quién resultó ser la víctima, resultando sólo una acción de prevención".

En su fallo, al que tuvo acceso Clarín, dice que "la posible víctima manifestó su deseo de no instar a la acción penal en orden a las lesiones que habría sufrido" y que "no hubo testigos presenciales que permitan dar fuerza a la versión.

Además, la filmación nunca puede reemplazar a un testimonio", pun tualiza. Y más adelante aclara que "la sola denuncia no basta para detener a una persona".

El viernes, el municipio supo que el fiscal había decidido cerrar la causa. "Acá había imágenes, una denuncia al menos corroborada por la víctima y todos los testigos del COT (Centro de Operaciones Tigre). No se puede cerrar la causa así a la ligera", dijo ayer a Clarín el intendente Sergio Massa.

"La actitud del fiscal fue al menos desconsiderada para con la sociedad. Se niega a investigar cuando las imágenes muestran claramente una tentativa de robo de auto, ni siquiera es un hurto porque acá hubo violencia. Se trató de un delito de acción pública y ante esto no podemos mirar para otro lado", señaló el jefe comunal.

Massa dijo que ya presentó una nota a Julio Novo, jefe de los fiscales en la jurisdicción, para ponerlo en conocimiento de la conducta del fiscal Lloret y pedirle explicaciones sobre el caso.

"Alguien debe dar una respuesta"
No es la primera vez que las imágenes de las cámaras de seguridad del Municipio registran un hecho criminal.

Cuando ocurrió el asesinato de Santiago Urbani, en el centro de Tigre, la fiscalía logró identificar a parte de los autores mediante las grabaciones de estas cámaras. Tras ello ordenó las primeras detenciones. "Casi siempre se trabaja en conjunto y hay reciprocidad con fiscales que son prácticos y hacen muy bien su trabajo. Ahora, si esa herramienta de prevención que tenemos es invalidada y no se sigue una acción penal cuando hay un delito, todo queda diezmado.

Da mucha bronca", apuntó el intendente Sergio Massa. Y remarcó además que "hay obligación de denunciar este tipo de actitudes porque el fiscal y los funcionarios estamos al servicio de la gente y alguien tiene que dar una respuesta".

Sin antecedente
Según los especialistas consultados por Clarín , el ladrón detenido en Tigre pudo ser procesado por el delito de "tentativa de robo automotor" , que tiene una pena máxima de cuatro años de prisión. Como es un delito excarcelable, podría haber quedado libre, pero a la espera de un juicio. Así, quedó sin ningún antecedente.

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